Ir al contenido principal

Mi Hogar


Todos tenemos un lugar seguro, o por lo menos eso es lo que queremos. Por muy aventureros que seamos siempre hay un lugar al cual queremos volver, buscamos tener un hogar.

Más que un espacio físico, se trata de la esencia que nos envuelve cuando estamos allí. Un edificio es solo eso, materiales inanimados que forman una estructura, pero un hogar es la esencia que lo llena todo, donde encontramos plenitud, plenitud expresada en amor, paz y esperanza. 

Hay una historia que me hace pensar que muchas veces desgastamos nuestras fuerzas buscando lo que ya esta dispuesto para nosotros. Una historia muy conocida nos cuenta sobre un pueblo que caminó 40 años por el desierto en busca de su tierra prometida, la que sería su hogar. Pero, pensando un poco sobre ésta historia llegué a una conclusión y quiero compartirla contigo:

Israel caminó en la presencia de Dios durante 40 años, pero la mayor parte del tiempo estaban pensando en el pasado (lo que habían dejado atrás) o en el futuro (la tierra que Dios le había prometido), ellos caminaban en busca de un hogar, sin darse cuenta que habitaban en él. Esto me lleva a creer que la presencia de Dios es nuestro lugar seguro, es donde todo tiene inicio y final, es un refugio para todo aquel que lo necesite y lo mejor de todo es que Él está siempre con nosotros.

¿Qué estás buscando en éste tiempo? ¿Dónde estás dejando tus fuerzas? ¿Dónde quiere estar tu corazón?

La biblia dice que donde está tu tesoro allí también estará tu corazón. Un tesoro es lo más importante que tenemos en nuestra vida. ¿Es Dios lo más importante para ti? ¿Ocupa el primer lugar? ¿Es tu mayor prioridad? ¿Es Dios el dueño de tu corazón?

Todos pasamos nuestra vida en una búsqueda incesante, ya sea un mejor empleo, ganar más dinero, otro título, un ministerio, una familia. Nos lamentamos por oportunidades que dejamos pasar o por aquello que no vivimos, y nos preocupamos por lo que está por venir, y es así como se nos agotan las fuerzas y se nos debilita el corazón.  

Si llegaste a leer hasta aquí y dices "sí Yelena, conozco el sentimiento", déjame decirte que no estas solo (a), todos hemos pasado por allí, por muy espirituales que parezcamos, todos en algún momento hemos dejado de escuchar la voz del Buen Pastor y hemos tomado caminos equivocados. Pero desde mi experiencia te tengo una muy buena noticia, Él no ha desistido de ti, eres su tesoro, no es tarde, Dios es "extravagantemente" bueno  para limpiar el pasado y hacer algo nuevo en tu vida, lo único que necesitas es estar dispuesto (a) a ser hallado por el Maestro.

Deja que Dios sea tu hogar, que su presencia sea el lugar al que siempre vuelves, o mejor dicho: ¡Qué Dios sea el hogar de donde nunca te vas!   

¡Que Dios te bendiga y te envuelva con su presencia, para que puedas conocer lo que significa encontrar tu verdadero hogar!


Comentarios

  1. Amiga, gracias por cada una de esas palabras... Ciertamente el mejor lugar en el que podemos estar es en Su Presencia, nuestro Hogar

    ResponderEliminar
  2. Muy buena reflexión yelen... comparto que el mejor hogar, es estar en su presencia..

    ResponderEliminar
  3. Simplemente llega al corazón...!!!

    ResponderEliminar
  4. Muy bueno Yelena 👏🏽👏🏽👏🏽

    ResponderEliminar
  5. Bellooo mi Yele! La presencia de Dios es nuestro Hogar! <3 Simplemente hernoso

    ResponderEliminar
  6. Amén Yele lindaaa!!! Gracias por compartir esta hermosa reflexión

    ResponderEliminar
  7. Que hermoso Yele 😍❤ te felicito!!gracias x compartirlo fue de gran bendición!!un abrazo!

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

Mi bendición en tiempos de pandemia

Mi nombre es Lisbeth, pero me pueden llamar Lis, así entramos en confianza y les cuento algo que tengo guardado en mi corazón. Los que me conocen saben que me caracteriza viajar, no puedo entender como alguien opine que viajar le produzca estrés, preparar maletas siempre produce en mí un estado de ¡emoción absoluta y alegría!  Pero esto no fue así en mi último viaje, ya que, aunque albergaba una esperanza, muy muy dentro de mí sabía que la salud de mi mamá estaba bastante deteriorada y no sabía si era la última vez que vendría a verla, había muchas interrogantes, temores, incertidumbre en mí con respecto a ella. Esto produjo mucha tristeza en esos días previos a mi vuelo. Fue así como el 24 de Febrero 2020 junto a mi pequeño Albert de 1 año y 11 meses (para ese entonces) salí de Guayaquil, ciudad donde resido desde octubre de 2016, hacía mi país, Venezuela, específicamente a Barcelona mi ciudad natal. Venía bastante cargada, tanto así, que tuve que pagar sobrepeso, pero les confieso

Carácter = Identidad

Una de las cosas que más me cuesta en la vida son las presentaciones, esas donde para que te "conozcan" tienes que poner todo tu currículo, muchas veces esto es incómodo. Si bien tus títulos o logros le dan un peso extra a lo que haces, eso no es todo lo que te define. Creo que lo más importante en la vida es la calidad de persona que eres, la autoridad proviene de los procesos en los cuales tu carácter ha sido transformado. Había una vez un hombre llamado Pablo, con un gran currículo, estudioso y conocedor de la ley; es más, provenía de uno de los mejores linajes que puede existir. Cierto día, entendió que nada de eso tenía valor, su concepto humano de identidad fue completamente desarmado y vivió para contarlo. (Fil 3) ¡Qué grande Pablo! No quiero decir que lo que haces y has logrado no tiene mérito, solo quiero que sepas, que no es lo que te da identidad. He conocido personas con grandes títulos y poco carácter, y he conocido gente de gran carácter que han logrado grandes